Todo asegurado desea tener certeza sobre cómo funcionarían su seguro en el caso de un siniestro. Ante una emergencia, contar con recursos financieros oportunamente puede hacer una gran diferencia, pero desafortunadamente, con frecuencia la respuesta en los reclamos demora mucho más tiempo del esperado.
Esta es una situación que no conviene a ninguna de las partes y que puede ser evitada si se consideran algunas líneas de acción por parte de los asegurados. A continuación te compartimos 4 recomendaciones que pueden ayudar a ser indemnizado con mayor prontitud.
1.- Tener un protocolo en el caso de un Siniestro
En todo siniestro existe un proceso básico que el asegurado debe conocer para reestablecer su operación y dar cauce de a la respuesta por parte de la aseguradora. Algunas acciones para tomar en cuenta son:
·Reportar el siniestro apenas se tenga conocimiento del mismo, esto permitirá a la aseguradora conocer en tiempo y forma, las causas y la extensión del daño, así como recibir algunas indicaciones oportunas para el seguimiento del siniestro y su resolución.
·Ejecutar medidas de salvaguarda y recuperación orientadas a minimizar la pérdida.
·Mantener comunicación con la aseguradora o con el ajustador a cargo, mostrando una actitud cooperativa que permita trabajar en equipo con la aseguradora, buscando las mejores alternativas para la pronta resolución del caso.
2.- Revisar procedimientos internos
En todo siniestro de daños se deberá comprobar el alcance de la pérdida, así como la propiedad y preexistencia de los bienes en reclamo, para lo cual la aseguradora solicitará el soporte documental en función del evento ocurrido.
Es por ello, que se sugiere mantener una contabilidad actualizada, lo que implica el registro de los bienes asegurados. Para el caso de las empresas micro o de personas físicas con actividad empresarial, guardar los comprobantes de las adquisiciones, apoyará en comprobar de manera eficiente la propiedad y preexistencia de los bienes.
En caso de que se eroguen gastos por algún concepto susceptible de reclamo, se sugiere de igual manera guardar los comprobantes de tales gastos.
Debe también tomarse en cuenta la necesidad de enterar a las autoridades en caso de algún siniestro en donde se persiga a los culpables, lo cual da solidez a la narración de los hechos ocurridos, permite acreditar el interés de los bienes afectados y finalmente apoya a la prevención del delito para casos futuros.
Finalmente, el representante de la empresa debe estar involucrado, lo cual permite agilizar la toma de decisiones relacionadas con el siniestro, hasta la firma del convenio de liquidación.
3.- Conocimiento Previo de los Alcances y Limitaciones de la Póliza
El asegurado no tiene porqué ser un experto en materia de seguros, sin embargo, necesita conocer en términos generales los alcances que tiene su póliza desde el momento de su contratación.
Es importante que se comprendan todos los beneficios que se adquieren en materia de protección. Asimismo, deben tenerse presentes las limitaciones de la póliza y así evitar ideas equívocas de sus alcances. Revisa tu póliza con la ayuda de tu agente de seguros y no te quedes con dudas en materia de coberturas.
4.- Tiempos de Respuesta del Ajustador y del Propio Asegurado
Mientras más rápido se reestablezca el bien afectado, la operación entorpecida o la resolución de alguna responsabilidad dada, se alcanzará la normalidad de la operación y es objetivo de todos que esto ocurra.
Para alcanzar este objetivo se requiere de estar en sinergia asegurado-aseguradora, en donde con una buena disponibilidad pueden abatirse tiempos de espera. La prontitud con que el asegurado integre su reclamación y dé respuesta oportuna a las dudas que se planteen, influye en gran medida en la resolución del reclamo.
Podemos señalar que el reclamo en un seguro, empieza a trabajarse desde el momento en que se contrata la póliza, haciendo conciencia de que cualquier reclamo necesita que el evento esté cubierto por la póliza y que el daño pueda soportarse documentalmente.
No necesitas ser un experto en seguros, pero existen elementos mínimos que como hombre de empresa debes conocer, para poder hacer uso de tus pólizas. Apóyate en un buen agente de seguros, asegura tu empresa adecuadamente y ocúpate para que en caso de necesitarse, puedas hacer un reclamo de la manera adecuada.